30 abril, 2024
El TSXG ha dictaminado que el Sergas debe indemnizar con 300.000 euros a una paciente que quedó parapléjica después de una operación de discectomía en el Complejo Hospitalario de Ourense. La sentencia, dada a conocer este pasado lunes, establece que el daño sufrido por la paciente es desproporcionado, ya que desde la intervención quirúrgica depende de una silla de ruedas y de terceros para realizar la mayoría de sus actividades diarias.
La paciente entró en el quirófano aquejada de una lumboaciatalgia izquierda y debilidad en extremidad inferior por una hernia discal, y «al despertar de la anestesia general, se evidenció una lesión neurológica severa varias vértebras por encima de la zona intervenida».
La mujer sufrió daño neurológico «a nivel distante de donde se practicó la intervención quirúrgica», según los peritos «ajeno o extraño» a la operación efectuada», indicaba inicialmente una sentencia del Juzgado de los contencioso-administrativo 2 de Santiago de Compostela, contra la que presentó un recurso.
El TSXG observa «varias explicaciones dadas por los peritos en relación a la causa del daño» en la sentencia del tribunal compostelano, pero «ninguna puede considerarse acreditada ni basada en datos objetivos, de modo que no dejan de ser hipótesis o posibilidades, respecto a las que, como ya se ha indicado, existen objeciones». Precisa que hay «una objeción clara a la causa que apunta la Administración, causa isquémica, que debería evidenciarse en los estudios realizados y, sin embargo, no es así».
En consecuencia, el TSXG considera que hay una responsabilidad patrimonial de la Administración autonómica, de la que depende el Sergas, en aplicación de la doctrina de daño desproporcionado.
«Si la Administración no es capaz de explicar por qué causas se produjo ese resultado tan llamativamente anómalo, habrá de asumir la responsabilidad, pero no así cuando pruebe debidamente que tal resultado se ha producido no obstante la observancia de la lex artis, cuando pruebe una causa de que no deba responder», concluye el alto tribunal que condena al Sergas a indemnizar.