Tal día como hoy… Fusilamiento de Solís y once de sus oficiales. Nacen los ‘mártires de Carral’

1846.- A las seis de la tarde y en el atrio de la iglesia de Santo Estevo de Paleo, en Carral, es fusilado Miguel Solís, jefe del que fuera Ejército Libertador de Galicia. Seguidamente, en el robledal conocido como fraga do rei, sufren la misma suerte otros once oficiales del ejército sublevado. Nacían, para la memoria colectiva de Galicia, los Mártires de Carral.

El monumento que se erige en medio de la villa en recuerdo de aquellos fatídicos sucesos fue inaugurado el 22 de mayo de 1904, con la concurrencia de repersentantes de la Liga Gallega y de autoridades municipales de las proncipales ciudades y villas gallegas, singularmente de Coruña, Santiago y Carral. El monumento fue diseñado por el arquitecto Juan Álvarez Mendoza y llevado a cabo por los constructores Sres. Escudero e Hijos. Tras la inauguración, se hizo donación del monumento al ayuntamiento de Carral, que se comprometió a conservarlo y cuidarlo para la posteridad.

Durante la madrugada, el oficial que mandaba el 2º cuerpo del ejército rebelde, Rubín y un ayudante huyen hacia Vigo con la intención de embarcar para el extranjero. El ejército, sin mandos, entra en desbandada y y se dispersa. El segundo oficial aconseja a la tropa la rendición, en la confianza de un indulto, mientras otros huyen hacia Portugal.

En Lugo, el general Villalonga exige la capitulación de la ciudad a lo que se niega la Junta, iniciándose el intercambio de disparos. De madrugada, los dirigentes de la Jun ta huyen, capitulando la ciudad.

De la Concha, por su parte, ocupa Pontevedra sin oposición y sigue la marcha hacia Vigo. En la ciudad olívica, parte de los componentes de las Juntas revolucioinarias de Santiago, Pointevedra y Vigo parten hacia el exilio en los buques de guerra Nervión  y Astuto.

1813.- D. Francisco Vázquez, miembro de la Diputación de la Coruña, y D. Pedro Pablo Bañuelos, ordenador de los ejércitos nacionales y ministro principal de Hacienda en este distrito, toman en Santiago posesión de todos los bienes muebles y raíces que pertenecían al extinguido tribunal de la Inquisición, en cumplimiento del soberano decreto de 22 de febrero del año dicho.

1506.- Llegan a la ciudad de A Coruña D. Felipe el Hermoso y doña Juana, aposentándose en San Francisco y obsequiaándolos la ciudad con grandes fiestas. Permanecerían en Galicia a lo largo de tres meses antes de entrevistarse con Fernando el Católico y adquirir la condición de reyes de Castilla