El balón vuelve a rodar

Claudio Giráldez inicia su primera temporada al frente del Celta de Vigo, con Iago Aspas como capitán, buscando una victoria en su debut contra el Deportivo Alavés, un desafío considerable teniendo en cuenta que el Celta no ha ganado en la jornada inaugural desde 2015. Giráldez, que anteriormente ha tenido inicios difíciles con el filial del Celta, espera cambiar esta tendencia.

El Celta enfrenta problemas financieros, incluida una alta indemnización a Rafa Benítez y la incapacidad de vender jugadores transferibles como Unai Núñez, Tadeo Allende y Luca de la Torre, entre otros. Esto ha limitado la llegada de refuerzos, salvo por los cedidos Ilaix Moriba (Leipzig) y Borja Iglesias (Betis), quienes probablemente no comenzarán como titulares.

El portero Vicente Guaita, clave la temporada pasada, no jugará debido a una lesión, dejando a Iván Villar y Marc Vidal como posibles sustitutos. En defensa, Giráldez podría alinear a Manquillo, Starfelt y Jailson, con Mingueza y Hugo Álvarez en las bandas. Jonathan Bamba se unirá a Aspas y Tasos Douvikas, el máximo goleador de la pretemporada, en la delantera.

Por otro lado, el Deportivo Alavés, a pesar de la salida de jugadores importantes, llega con muchas caras conocidas. Con algunas lesiones en defensa, Hugo Novoa y Nahuel Tenaglia estarán disponibles. Luis García Plaza ha confirmado que el equipo tiene un sólido centro del campo, con Tomás Conechny y Luka Romero ofreciendo opciones ofensivas.

Moussa Diarra jugará en el lateral izquierdo, ya que Manu Sánchez no puede enfrentarse a su equipo de origen. Abdel Abqar buscará un compañero en la defensa central, mientras que Antonio Blanco y Ander Guevara estarán en el centro del campo. En el ataque, Jon Guridi, Carlos Vicente y Luis Rioja conectarán con la referencia ofensiva, que podría ser Kike García, Asier Villalibre o ‘Stoichkov’.

El Alavés mantendrá su esquema habitual, a pesar de las nuevas incorporaciones, tras una pretemporada con buenos resultados.