23 julio, 2024
El juzgado de lo contencioso-administrativo número 1 de Pontevedra ha advertido al Servizo Galego de Saúde (Sergas) acerca de los errores reiterados que se están detectando en los diagnósticos de pacientes que sufren torsiones testiculares.
Y es que este tribunal ha condenado al propio Sergas a indemnizar con 35.000 euros a un paciente por «deficiente asistencia sanitaria» en el Punto de Atención Continuada (PAC) de Silleda, que resultó en la extirpación de un testículo infartado y necrosado debido a un error en el diagnóstico de una torsión testicular.
En la propia sentencia, el juez destaca que en el sistema sanitario público gallego se están produciendo reiteradamente errores de diagnóstico en casos de torsión testicular, con consecuencias graves, mencionando el magistrado al menos cinco sentencias similares del Tribunal Superior de Justicia de Galicia (TSXG).
El juzgado, ha instado a la Axencia Galega para a Xestión do Coñecemento en Saúde a revisar los protocolos y la formación del personal sanitario para evitar estos errores. La sentencia señala que en el caso de Silleda, la doctora que atendió al paciente atribuyó el dolor a una inflamación de otra causa, sin descartar primero la torsión testicular mediante una ecografía Doppler o remitir al paciente al hospital.
El tribunal concluye que hubo mala praxis médica y que una intervención urgente podría haber salvado el testículo, probando así el daño y la relación causal. La sentencia no es firme y puede ser recurrida ante el TSXG.
Por su parte, la Consellería de Sanidade ha declarado que trabaja para asegurar diagnósticos precisos y lamenta los errores, asumiendo responsabilidades y revisando protocolos asistenciales para mejorarlos y considerar formación específica sobre esta dolencia.