13 agosto, 2024
La nueva base aérea de Verín-Oímbra, la primera transfronteriza entre España y Portugal, ha quedado «plenamente operativa» este martes. Su objetivo es mejorar e intensificar la capacidad de respuesta en la extinción de incendios y consolidar los mecanismos de cooperación entre Galicia y el norte de Portugal.
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, visitó las instalaciones y destacó que la base está dotada de «magníficos profesionales» que podrán actuar a ambos lados de la frontera. «Ojalá no sea necesario utilizarla mucho», comentó, destacando la dotación de medios materiales y humanos disponibles.
La base ha recibido una inversión cercana a los 5,5 millones de euros, cofinanciada por el programa Interreg POCTEP, y está orientada principalmente a la extinción de incendios. En sus instalaciones pueden operar helicópteros y aviones de carga en tierra. El aeródromo dispone de una plataforma de estacionamiento para seis aeronaves, un helipuerto para cuatro helicópteros y una pista de aterrizaje de 1.200 metros.
Además, cuenta con cuatro depósitos de agua, instalaciones de carga de combustible, una torre de control y un edificio de descanso con tres zonas diferenciadas: una para pilotos de aviones, otra para pilotos de helicópteros y una más para brigadas contraincendios.
Rueda, acompañado por la conselleira de Medio Rural, María José Gómez, aseguró que esta nueva base ejemplifica la cooperación fluida e intensa con Portugal, reforzando la Eurorregión Galicia-Norte de Portugal como ejemplo de integración y dinamismo, y proporcionando un salto de calidad en la extinción de incendios.
También agradeció el trabajo de los más de 7.000 efectivos que integran el operativo contraincendios en Galicia e hizo un llamamiento a la ciudadanía para colaborar en la detección y prevención de incendios, instando a notificar cualquier indicio de fuego a través del número 085.