19 julio, 2024
La Xunta de Galicia, la Diputación de Pontevedra y la entidad financiera Abanca han escenificado este viernes en Vigo la compraventa del Teatro Fraga, que era propiedad del banco, una hora antes de que el pleno de Vigo, en un sesión extraordinaria y solo con los votos favorables de los socialistas, reclamara la cesión gratuita del inmueble en un nuevo episodio de enfrentamiento entre instituciones y partidos.
Las administraciones autonómica y provincial se repartirán la titularidad del inmueble (51 % y 49 %), al que pretenden dar «una nueva vida» tras abonar 9,3 millones de euros a Abanca.
El emblemático edificio en el centro de la ciudad fue cerrado en 2001 y se encuentra remodelado por fuera, pero lóbrego por dentro, después de que se paralizaran las obras en 2011.
«Es un día muy importante», afirmó, en el propio Teatro Fraga, el presidente del Gobierno gallego, Alfonso Rueda, acompañado de los conselleiros de Cultura, José López Campos, y Hacienda, Miguel Corgos, además de la delegada de la Xunta en Vigo, Ana Ortiz.
El dirigente autonómico cumple así una de sus promesas de la campaña electoral, cuando avanzó la operación para comprar el Teatro Fraga, en la que encontró «un magnífico aliado» en la Diputación pontevedresa.
A Abanca le agradeció haberse decantado por la propuesta que presentaron, porque «podía haber muchas intenciones sobre el edificio, pero hacía falta una oferta concreta» y esa fue la de los dos socios institucionales.
«Este magnífico edificio empieza una nueva vida. Queda aquí mucho trabajo por hacer y muy ilusionante», sostuvo Rueda, que aspira a que ese teatro suponga «un antes y después en la vida cultural de Vigo y Galicia» y dejó en manos de los técnicos de la Diputación y de la Consellería de Cultura el «plan de usos» de estas instalaciones para licitar las obras, un proyecto en el que escucharán al «enorme tejido cultural de Vigo» para plasmar sus ideas en el edificio.
El dirigente de la Diputación, Luis López, expresó el deseo de que el Fraga sea «un laboratorio de ideas y una fábrica de talento, un centro pionero».
Por la parte vendedora, el consejero delegado de Abanca, Francisco Botas, reveló que aceptaron la oferta después de «un importante esfuerzo de valoración económica» ya que entendían que «el fin de abrirlo a la sociedad era fundamental».
Botas celebró que los dos compradores hayan decidido «reactivar con tanto impulso» el Teatro Fraga y ayuden a traer «cultura y propuestas» a Vigo, una oferta que ampliará la que ya ofrecen otros inmuebles de Abanca en la ciudad más poblada de Galicia y que, en su opinión, «va a ser algo diferencial».
Con la firma aún caliente, el Ayuntamiento acogió un pleno extraordinario en el que salió adelante la propuesta de los socialistas para solicitar a Abanca la donación del Teatro Fraga a Vigo.
La propuesta del grupo municipal del PSOE solo fue respaldada por sus concejales, en tanto que el PP se opuso y el BNG, que rechazó la operación pero se abstuvo en el pleno, presentó una moción a la totalidad que no prosperó ya que no estaba de acuerdo con los términos que incluyeron los socialistas.
El portavoz socialista, Carlos López Font, se remontó, con «nostalgia» al cierre del Fraga a principios de siglo y a la fusión de las cajas gallegas que «impuso Feijóo» en 2011.
Aseguró que desde entonces mostraron desde Vigo interés por el edificio y fueron «respetuosos» mientras esperaban la decisión de Abanca respecto a ese inmueble, «siempre con la máxima» de que el edificio «es patrimonio de la ciudad y que el Ayuntamiento debería ser el primero en conocer las intenciones» de la entidad financiera para trasladarle su propuesta.
En todo ese tiempo, comentó Font, a la Xunta «nunca» le oyeron nada sobre el Fraga hasta la «sorprendente noticia» de su venta, una «operación presidida por la opacidad».
El portavoz del BNG, Xabier Pérez Igrexas, sostuvo que la fusión de las cajas «privó a Vigo de poder contar con el teatro» y afirmó que fue un «verdadero expolio que ahora Xunta y Diputación» quieren recuperar con «dinero de todos».
El portavoz del PP, Miguel Martín, aseguró que Caballero, en la reunión de junio, le pidió al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, que el Ayuntamiento pudiera entrar en la compraventa, algo que el alcalde negó con la cabeza.
«Rueda tiene fama de mentiroso y lo suele ser sobre Vigo. Le ha informado muy mal de la posición del alcalde porque solo hay una: la gratuita», le replicó López Font.
El edil popular consideró este viernes «un día histórico para Vigo» por recuperar el inmueble después de «20 años cerrado» y ponerlo «de nuevo a disposición de los vigueses, de su tejido artístico y cultural, que será determinante» a la hora de establecer los usos del Fraga.