20 junio, 2024
1770.- Se hace entrega judicial a la excelentísima señora doña Rosa María de Castro, Condesa de Lemos, del Colegio de Monforte, colegio cuyos progresos fueron rápidos desde entonces. En 1786 asistía a las escuelas de primeras letras y gramática y a las cátedras de Filosofía y Teología un número considerabilísimo de alumnos.
En efecto, tras la expulsión de los Jesuitas de Monforte por orden de Carlos III, la condesa de Lemos se hizo cargo del colegio y encargó a su confesor, D. Melchor de Borruel, la elaboración de unas Constituciones o Reglamentos que sirviesen de guía para el desarrollo de la vida escolar. Dichas recomendaciones, elaboradas en 34 capítulos, llaman la atención por su rigidez y exigencias que, para una mentalidad moderna, parecerían demasiado rigurosas y casi inhumanas pero que eran lo usual en aquellos tiempos.
El colegio, que actualmente pertenece a la Fundación Colexio Nosa Señora da Antigua, Monforte de Lemos, fue idea del cardenal Rodrigo de Castro quien en una visita a Compostela, en 1590, concibe la idea de construir en el solar de sus mayores un pequeño Escorial que fuera centro de cultura para Galicia, panteón familiar y museo de arte.
Los Jesuitas fueron los escogidos para dirigir la construcción del edificio y la iglesia y, además, regentar el Colegio, en el que permanecerán hasta la 1767, tras 174 años de presencia. Desde entonces y hasta 1873, cuando llegan los Escolapios, el Colegio del Cardenal fue dedicado a diversos cometidos, un periodo que duró 106 años.
Es en el citado 1873 cuando el duque de Alba José Guitián y García hace las gestiones pertinentes para que los Padres Escolapios se hagan cargo del centro, y ahí siguen, 151 años después.
1474.- Privilegio de Felipe IV concediendo a los Moscoso y Muros un juro –especie de pensión perpetua que se concedía sobre las rentas públicas- de 160.000 maravedíes situados en las alcabalas –puestos de pago de impuestos o fielatos por venta de productos- de Malpica, Muxía, Muros, Fisterra, etc.