13 junio, 2024
Las recientes críticas de de la ministra de Sanidad, Mónica García, quien señaló que las comunidades gobernadas por el PP pretenden utilizar a los residentes de último año como «mano de obra barata» han recibido la respuesta de la Xunta. Concretamente de la mano del titular de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, quien de hecho a replicado a la ministra que “los MIR no son mano de obra, y menos barata”.
En declaraciones a los medios en Santiago, Gómez Caamaño reiteró que la propuesta de cubrir las necesidades asistenciales de los centros sanitarios durante el verano con la incorporación voluntaria de médicos internos residentes (MIR) de último año, bajo la supervisión de un especialista, “se ajusta perfectamente a la legalidad”.
El conselleiro destacó que, aunque los residentes “son médicos en periodo de formación”, están a punto de concluir dicho periodo y, por lo tanto, son “médicos muy bien formados” que pueden “perfectamente pasar consulta”.
Gómez Caamaño enfatizó que en Galicia este plan es “voluntario, incentivado y supervisado”, y cumple con la legalidad y los requisitos de formación de los residentes en medicina familiar y comunitaria.
Añadió que si la ministra no conoce los planes de estudios que acreditan estas competencias, desde Galicia se los enviarán sin ningún problema.
En esta línea, también adelantó que su departamento presentará la próxima semana al Consello de la Xunta un informe que contempla las medidas para la “situación excepcional” prevista para este verano.
Según señaló el ejecutivo gallego, por el momento, este no dispone de datos sobre el número de residentes de último curso que participarán en este refuerzo estival, ya que “cada área sanitaria” está gestionando esta cuestión con la previsión de que la iniciativa esté en marcha el 1 de julio.