3 mayo, 2024
Una protesta de vecinos detuvo la tala de árboles programada para este pasado jueves en el talud de Falperra, cerca del Ayuntamiento de Vigo. Esto ha provocado que los grupos de oposición vuelvan a solicitar transparencia y explicaciones al Gobierno local sobre su política en relación con los espacios arbolados de la ciudad.
Los residentes llegaron con carteles temprano en la mañana para exigir que no se llevara a cabo la tala de árboles, ya que estaban al tanto de los planes, dado que el Ayuntamiento había anunciado la víspera un corte de tráfico en la zona para «limpiar el talud de Camelias».
Miembros de las agrupaciones ecologistas Amigas das Árbores y Amigos da Terra, así como de la Plataforma Vigo Verde/Salvemos A Barroca, la Asociación de Vecinos Vigo Centro y representantes del BNG y el PP, se trasladaron al lugar. Además, estuvo presente el Seprona, cuyos agentes solicitaron informes que justificaran la tala, solicitud que aún no ha sido atendida.
Todos ellos se oponen al «arboricidio» del Ayuntamiento, que es como denominan a la política del Gobierno de Abel Caballero, al que acusan de talar arbitraria e indiscriminadamente, sin justificación alguna, árboles de gran porte que después sustituyen por arbustos.
El Ayuntamiento ha reiterado en varias ocasiones que las talas que lleva a cabo se deben a que los árboles están envejecidos y representan un riesgo de caída, lo que podría poner en peligro a los ciudadanos.
Según el BNG, la tala programada para este pasado jueves no era más que una continuación de otras talas recientes en la calle Manuel Olivié o Samil, y es coherente con la amenaza que se cierne sobre el bosque de Casaliños, en Navia, donde el Concello planea construir el polivalente Vigo Arena.
“Que sea la movilización de las vecinas y vecinos la que paralice una tala da muy buena cuenta del amplísimo rechazo social que provoca la política arboricida del Gobierno municipal de Abel Caballero”, ha dicho el portavoz del BNG, Xabier Pérez Igrexas.
“Vigo no soporta más arboricidios que suponen un suicidio ecológico, y las viguesas y vigueses reclaman su derecho a una ciudad verde, en la que que o arbolado urbano juega un papel absolutamente esencial en términos de sostenibilidad», ha añadido.
El BNG ha solicitado la convocatoria urgente del Consejo Sectorial de Medio Ambiente del Concello para definir medidas concretas como la puesta en marcha de un Plan de Protección del Arbolado.
“No podemos seguir soportando tallas arbitrarias y sin motivo, que se pretenden justificar con invocaciones genéricas a problemas de seguridad, pero que van en contra de la normativa ambiental, empezando por la propia ordenanza municipal de medio ambiente”, ha continuado el portavoz nacionalistas.
Martín ha exigido a Caballero que actúe con “total y absoluta transparencia” en una cuestión “tan delicada” para que “no quede ni un atisbo de duda al respecto” y ha señalado que no sólo debe facilitar esos documentos a los colectivos que lo soliciten, sino que debe ordenar al edil responsable que comparezca para dar explicaciones.
“Informes y comparecencia que seguimos echando en falta y hoy, por segunda vez, volvemos a demandar con urgencia. El Gobierno local no puede seguir escondiéndose detrás de unos escuetos comunicados de prensa con los que trata de justificar la tala y poda a destiempo de centenares de árboles que lleva acometiendo desde hace mucho por toda la ciudad”, ha remarcado Martín.
En un comunicado, el Ayuntamiento de Vigo ha afirmado que sus técnicos fueron quienes desaconsejaron la tala de árboles en Falperra debido a la posible presencia de nidos de aves que deben ser protegidos.
Esta declaración surge como respuesta a las afirmaciones del PP y el BNG, quienes sugirieron que la tala de árboles programada para este pasado jueves no se llevó a cabo debido a la protesta vecinal y la presencia del Seprona. Según los populares, los agentes del Seprona solicitaron sin éxito los informes que justifican la necesidad de realizar estas talas.
“Los técnicos del área de Parques y Jardines se acercaron esta mañana al talud de Falperra para comprobar el estado de la masa arbórea. Una vez allí, tomaron la decisión de mantener temporalmente los ejemplares en ese espacio ante la posibilidad de que existan nidos de aves al estar en el período natural de nidificación”, sostiene el Ayuntamiento.
Según el Gobierno municipal, “es completamente falso” que el aborto de la operación se debiese a las presiones vecinales o la intervención del Seprona.
“Cabe recordar”, insiste el Ayuntamiento, “que existen informes previos que recomiendan la eliminación de las especies invasoras que ayudan a propagar el fuego, como las acacias negras, y que ponen en peligro la seguridad ciudadana por los amplios espacios que ocupan, y porque se encuentran en zonas próximas a viviendas o carreteras”.