Tal día como hoy… Primera resolución de la Audiencia de Galicia para ubicarse en A Coruña, «una tabernilla de vino de Ribadavia»

1564.- La audiencia de Galicia, que a pesar de las Reales Cédulas de Felipe II no se había trasladado a A Coruña decide en esta fecha, con la intención de cumplir aquel mandato, al parecer como la primera de sus resoluciones, el establecimiento de una “Tabernilla de vino de Ribadavia para la Audiencia”.

La Real Audiencia había sido creada en 1480 con carácter itinerante, situación que cambió a comienzos del S. XVI cuando fija su residencia en Santiago de Compostela, en el solar que ahora ocupa la Capilla General de Ánimas, y a donde volvería de forma provisional de 1825 a 1832 por avatares de la política.

Pese a decidirse su traslado en 1563 por orden real, no sería hasta 1578 cuando se efectuaría el traslado a la ciudad herculina, una vez vencida la resistencia de sus miembros a abandonar las comodidades que ofrecía Compostela, ciudad entonces más desarrollada que la de A Coruña.

La documentación generada por la Real Audiencia del Reino de Galicia constituye en la actualidad el fondo fundamental del Archivo del Reino de Galicia.

1890. Fallece en Madrid D. Tomás María Mosquera , nacido en el municipio ourensano de Cea en 1823, cuyos destinos municipales rigió durante algún tiempo. Fue diputado y senador en distintas legislaturas, así como director general de los Registros y el Notariado, ministro de Gracia con carácter interino y, por dos veces, ministro de Ultramar. En esta su última condición, presentó en el Congreso de los Diputados el proyecto de ley de abolición de la esclavitud en las posesiones de España en América, que el mismo Mosquera creía que debería ser inmediato en Puerto Rico y gradual en Cuba. La República de 1873 aprobó la ley al tiempo que Castelar prometió la próxima abolición de la esclavitud en Cuba.

1846. Es indultado el sargento Antonio Samitier, que se sublevara con Solís. Sin embargo, a los cuatro días fue fusilado en Betanzos.

1512. En bula de esta fecha, el papa Julio Il eximió totalmente al Hospital Real de Santiago de la jurisdicción eclesiástica; sujetándose a la Santa Sede únicamente al administrador y capellán mayor.