11 abril, 2024
Preparémonos para un gran acontecimiento similar al “planetario” que en su día anunciara la ministra de Exteriores, Leire Pajín, anunciando el encuentro entre su jefe Zapatero y Barack Obama. Resulta que el secretario general de los socialistas compostelanos, Aitor Bouza, acaba de anunciar su propósito de llevar al Parlamento gallego “un paquete de medidas para resolver o colapso nas urxencias do CHUS”, como titula algún diario. Al margen de esa salida de pata de banco a la hora de descalificar al conselleiro acusándole de lo que él mismo hace, su militancia política ¿seguro que no hay argumentos serios?. Pero lo que importa es el conocimiento de esa piedra filosofal que acabara con los problemas de urgencias y que va a resolver este jurista y profesor. ¿Cuándo nos la va a revelar?.P porque, en efecto, la saturación de urgencias es un problema endémico entre otras razones por falta de médicos ¿Los encontrará?
En el largo y reiterativo debate sobre la carencia de plazas de estacionamiento para aparcar en el hospital –hospitales- y mientras sigue deshojándose la margarita de las competencias ¿No sería bueno que el Concello aplicase un mucho más racional servicio de autobuses que realmente cumplan la finalidad de actuar como lanzaderas del Chus o del Hospital de Conxo, sin que la espera o el conocimiento del servicio sean un hándicap? ¿No sería bueno también que se procediera en Conxo a un repintado más racional de las plazas de estacionamiento para optimizar el recinto? Pues ya ven, la alcaldesa se desinhibe del problema diciendo que solo el 22 por ciento de enfermos del área corresponden a la capital, pero que estos necesitan plazas lo demuestra que sólo uno de cada diez acuden al CHUS en autobús urbano. ¿Y los otros donde aparcan?. O, como quería el PP, ¿van en bicicleta desde la estación intermodal.?
De un tiempo a esta parte el portavoz Popular en el consistorio compostelano está que se sale en propuestas, sino racionales, al menos sorpresivas, por lo estrambótico. La última de las ocurrencias, olvidando incluso que entre Santiago y Lisboa se interpone Oporto, que ya es olvidar, pretende que la capital gallega se convierta en alternativa a Lisboa como polo de atracción para empresas de países lusófonos, especialmente en áreas biosanitarias y en el sector de la innovación. Una ambiciosa propuesta que sugiere algunas preguntas ¿Conoce el concejal las dimensiones, especialidades, capital humano, accesibilidad de vías de comunicación internacionales, etc, etc….. del tejido empresarial de Lisboa? ¿Consultó su propuesta con el siempre sensato consejo del secretario del Eixo Atlántico, Xoán Vázquez Mato?