10 marzo, 2024
Abanca lanza B100, un neobanco que aspira a captar 500.000 clientes y ser rentable a finales de 2026 poniendo foco en incentivar la salud financiera, personal y del planeta. Nace con cuatro productos, que completará en el futuro, entre los que se incluye una cuenta que premia con una remuneración del 3,40% TAE el esfuerzo del usuario por mejorar su salud andando o corriendo, y fomentará la recogida de plásticos en el mar cada vez que el cliente abone sus compras con la tarjeta.
El director ejecutivo de Abanca, Jorge Mahía, explicó que el proyecto surge de una profunda reflexión y estudio, ante el convencimiento de que hay una demanda clara por parte de los usuarios. «Hay una explosión sobre la vida saludable, el cuidado de la salud mental. ¿Un banco, una empresa tiene que cuidar la salud? Nosotros creemos que sí», indicó durante encuentro para explicar el lanzamiento de la entidad, en cuyo desarrollo Abanca va a comprometer 25 millones de euros en dos años.
La entidad, que operará exclusivamente como banco móvil y sin red de sucursales, visibiliza su autonomía con una imagen también distinta a la del grupo y el color amarillo. Tendrá equipo autónomo liderado por Mahía, pero se apoyará en la estructura de Abanca para cuestiones operativas internas.
«El banco incentiva la salud financiera, del planeta y personal», señaló. Su porfolio arranca con una cuenta básica sin límite de saldo, otra remunerada al 2,70% TAE para aportaciones de hasta 50.000 euros y una herramienta donde el cliente podrá fijarse objetivos de ahorro para, por ejemplo, viajar o formalizar estudios. Bastará con programar una cuantía, el plazo para su consecución y establecer reglas para que esa hucha se dirija a la meta prestablecida, como podría ser que derive el redondeo al euro en todas las compras u ordenar una cuantía determinada por esas mismas compras.
La Cuenta Save remunerará al 3,4% TAE los éxitos en manteria de salud personal. Para beneficiarse, el cliente deberá fijarse un objetivo de pasos al caminar o correr (con un mínimo de 8.000) y la entidad transferirá automáticamente fondos desde la cuenta personal a medida que vaya cumpliéndolos. Recompensa el esfuerzo con un sistema conectado a aplicaciones que lo miden disponibles en IOS y Android.
«Cuando mayor sera el reto más podrá ahorrar y mayor será la recompensa», explicó Paloma Barreiro, responsable de producto de la entidad. Con 6.000 euros, el ahorro podría ser de hasta 4 euros y 30 si el esfuerzo alcanza los 20.000.
La tarjeta de débito establece un automatismo también similar por cada compra, pero en beneficio de la limpieza de los océanos. El banco destinará el 25% de la comisión de descuento de cada operación a financiar esas labores de la mano de la fintech española Gravity Wave, presente en más de 70 puertos españoles y que está volcada en recoger redes en el mar para su posterior reciclaje. Todos los productos están exentos de comisiones, el dinero en las cuentas siempre está disponible y la tarjeta de débito acepta además operaciones en divisas sin repercutir costes por tipo de cambio.
Su foco será la captación de clientes externos al grupo. «En Abanca no vamos a hacer estrategia de migración de clientes. Nace para el 87% del mercado que no tenemos, hay todo un océano azul para ese 87% de clientes», ilustró Mahía (el grupo tiene por cuota de mercado el otro 3%). Sus productos disponen, en cualquier caso, del apoyo de Abanca para tener la licencia o, incluso, para la protección del ahorro del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD).
Su imagen corporativa no referencia a la del grupo. Frente al azul de Abanca, el nuevo neobanco se vestirá de amarillo. «Es el color del trigo, del sol, del optimismo. El proyecto tenía que ser optimista», indicó Luis Franqueira, responsable de Marketing de Abanca. Incorpora una B «muy fuerte y muy sólida, muy pesada» que sí rememora Abanca, a un banco y al verbo inglés «to be, de animar a la gente a ser algo que tiene mucho que ver con decidirse a hacer cosas», agregó.
Este spin off permitirá además al grupo llegar a cualquier rincón después de que Abanca haya construído una red que cubre toda la geografía nacional y se extienen a Portugal con su carrera de compras. Desde que el grupo Banesco entró en España en 2012 con la adquisición de Banco Etcheverría y dio el salto un año después al adjudicarse Novagalicia Banco en el proceso abierto por el Frob, ha sumado Popular Servicios Financieros, el negocio portugués de Deutsche Bank, la actividad en España de Caixa Geral de Depósitos y de Novo Banco, Bankoa, Targobank y el luso Eurobic.
En su génesis Novogalicia lanzó, de hecho, en el año 2012 la filial online Evo Banco para llegar a clientes en cualquier lugar, aunque fue adjudicada a Apollo durante la posterior nacionalización de la entidad y hoy es propiedad de Bankinter, que la compró después al fondo americano.
La entidad liderada por Juan Carlos Escotet se une con B100 al grupo de entidades que disponen de un neobanco para cubrir segmentos específicos de clientes o, simplemente, atender a sus usuarios más digitales, al margen de sus propias webs y apps. Santander cuenta con Openbank, CaixaBank con Imagin, y Bankinter con Evo Banco.